
· “La he liao parda” (chica entrevistada en un informativo).
· “Claro… como el Luisma es tonto…” (Aída).
· “Un poquito de por favor” (aquí no hay quien viva).
· “¡¿Pero esto qué es, pero esto qué es?!” (Matías Prats en el Telediario).
· “Chanquete ha muerto” (Verano Azul).
· “Me encanta que los planes salgan bien” (el equipo A)
· “¿Cómo están ustedes?” (Los payasos de la tele)
· “¡Zas, en toda la boca!” (Padre de familia)
· “Me llamo Bond, James Bond” (James Bond, 007)
· “¡Esto no es lo que parece!” (Todos los culebrones del mundo)
· “Si hay que ir se va, pero ir pa ná es tontería” (cruz y raya)
· “¡Cuñáaaaa!” (El risitas)
· “Yo soy tu padre” (la guerra de las galaxias)
· “¿Me entiendes…? (Belén Esteban)
· “¡Yo por mi hija MA-TO! (Belén Esteban)
· “Un Beso corazones” (Patricia Conde)
· “Be water my friend” (Bruce Lee)
· “Amparo, ¿te has fumao un porro?” (El pozi)
· “¿Por qué no te callas? (el rey de España)
· “¡Hablemos de mineralismo, cojones!” (Fernando Arrabal)
· “En ocasiones, veo muertos” (El sexto sentido)
· “Aing omá que rica!!” (Miki Nadal, Slqh)
La pregunta es: “¿Por qué si estamos convencidos de que no vemos los programas o el cine a los que pertenecen estas frases, las conocemos?”
Puede que no seamos sinceros a la hora de decir a los demás la televisión que vemos. Y lo cierto es que la televisión manipula nuestros pensamientos…